martes, 23 de marzo de 2010

Una terrenal...

El vistió lo mejor que pudo.
Ella arreglo su departamento que parecía digno de una revista de decoración.
El dudaba entre ser puntual o no.
Ella estaba lista dos horas antes sentada en el sillón mirando el reloj.
El llegó a las ocho.
Ella lo recibe atentamente midiéndose de no meter la pata.
El hacía la mismo y era una conversación muy acartonada.
Ella le hace un guiño de confianza.
El rompe el hielo.
Ella le pide un minuto y va al baño
El espera en el sillón
Ella llega a la perfección frente al espejo.
El pekinés blanco se tira frente a él, primero se rasca y luego se lame bien los huevitos.
Ella sale del baño despampanante y se dirige al sillón.
El pekinés sale a su encuentro.
Ella en un acto de ternura lo levanta y lo besa en el hocico, mientras el perro le lame la cara y la boca en recíproco gesto...

Ella se sienta con una muy practicada pose en el sillón
El le habló del clima, política, deportes varios... mira el reloj, la saluda y se va...

Ella toma el teléfono y llama a su amiga, le dice que ya no quedan hombres...

"Ni tampoco perros con buen gusto en las bolas" le contestó la amiga conocedora del problemilla de fondo...

No hay comentarios: